Los rumores acerca del divorcio entre Kim Kardashian y Kanye West finalmente se hace realidad, según afirman varios medios estadounidenses. De acuerdo a las informaciones, la famosa pareja se separa después de seis años de matrimonio y cuatro hijos en común, lo que ya se podía intuir después de la grave crisis por la que llevan pasando desde hace meses.
Al parecer no hay marcha atrás, por lo que ya han comenzado con su primera guerra interna para quedarse con la casa en la que viven y con la custodia de sus pequeños. Es que Kim y Kanye formaban una de las parejas más adineradas de Hollywood ya que ambos han sabido amasar sendas fortunas gracias a sus respectivos trabajos.
Se estima que el patrimonio que han conseguido a lo largo de su matrimonio tiene un valor de 2,2 billones de dólares, una cifra estratosférica por la cual ambos van a luchar. De hecho, la primera disputa ya está sobre la mesa y gira en torno a su casa de Calabasas, una exclusiva urbanización de Los Ángeles, que adquirieron en 2014 y que perteneció a Lisa Marie Presley.
La mansión, de casi 16.000 metros cuadrados y que ha sido el hogar familiar de los West-Kardashian, tuvo un costo de unos 60 millones de dólares entre la compra-venta y las obras de mejora que tuvieron que efectuar. Allí es donde han vivido durante los últimos seis años aunque desde hace unos meses el rapero se trasladó a su rancho de Gwyoming, alejado de su esposa e hijos, para estar tranquilo y tomarse un tiempo para pensar.
Ahora que la pareja va a divorciarse, la mansión de Calabasas se ha convertido en objeto de deseo de ambos. «Kim está intentando que Kanye renuncie a la casa de Calabasas para que se la quede ella ya que es el lugar donde sus hijos viven y han crecido. Ese es su hogar», dijo una persona cercana a la pareja a Page Six.
Y aquí es donde viene otro punto que podría ser conflictivo: la custodia de sus cuatro hijos. La empresaria y el productor son padres de North West de 7 años, Saint de 5, Chicago de 2 y el pequeño Psalm, de tan solo un año de vida. Según informa The Sun, la influencer quiere «la custodia total» de los niños y no tiene intención de ceder en este aspecto.
El divorcio de la pareja se desencadenó después de una fuerte discusión el pasado mes de diciembre. Fuentes cercanas a la empresaria han confirmado que ha contratado a Laura Wasser, una de las abogadas matrimoniales más prestigiosas de Estados Unidos y especializada en casos de divorcios entre celebridades. De hecho, fue Wasser quien asesoró a Liam Hemsworth en su ruptura con Miley Cyrus hace justo un año.
En este sentido, la misma fuente apunta a que Kim Kardashian está preparada para que las cosas «se pongan feas» si es necesario, ya que la custodia de sus cuatro hijos es algo innegociable para ella. «Ninguno de los dos quiere quedar como un perdedor en el proceso de divorcio y los dos van a luchar por quedarse con los niños», publica The Sun donde también se asegura: «Kim ha dejado claro que quiere la custodia completa así que si Kanye continua luchando por ella, la batalla será brutal».
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