Una mujer española se encuentra en plena pelea judicial contra la Consejería de Salud, dependiente del Gobierno La Rioja, al norte del país, entidad a la que exige 3.5 millones de dólares, debido a que al nacer fue intercambiada por otra niña por un “error humano”, siendo entregada a una madre que no era la suya.
La grave situación ocurrió en 2002, en el ex Hospital San Millán, cuando dos niñas llegaron al mundo con cinco horas de diferencia y, cada una de ellas, fue entregada a la familia de la otra tras pasar por la incubadora.
La ahora demandante nunca vivió con los padres a los que fue entregada y fue criada por la teórica abuela (en realidad abuela de la otra niña) que consiguió su tutela.
En el año 2017 la abuela quiso presentar una demanda de alimentos al padre al que había sido entregada y una prueba genética sacó a la luz que realmente no lo era. Posteriormente se descubrió que tampoco era hija biológica de la madre a la que había sido entregada, dejando en evidencia el error con ambas niñas.
Luego se abrió una investigación con un abanico de niños que determinó que la confusión sólo podía haberse dado con la otra niña, que nació con cinco horas de diferencia y con la que tiene el grupo sanguíneo cambiado, publica El Mundo.
A la vez, el despacho de abogados de la demandante inició una reclamación administrativa de responsabilidad patrimonial por daños morales reclamando una indemnización de más de tres millones de euros, frente a los 215.000 euros que ofrece Salud.
Desde la Consejería de Salud, su consejera, Sara Alba, reconoció que el intercambio se produjo, y lo ha calificó como un “error humano” de una persona que no se ha logrado identificar, pero destacó que se trata de un caso que se produjo “hace dos décadas y que se judicializó la legislatura pasada”.
El abogado de la demandante manifestó que el daño producido es “inconmensurable, continuado y de por vida” porque “esta persona no se va a librar nunca del estigma de esta confusión”. Se trata de “fortalecer su personalidad económica con la finalidad de que tenga un futuro asegurado” aunque lo ocurrido “no sea reparable”.
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