Un bonsái flotante va más que bien encaminado en su campaña para reunir fondos en Kickstarter.
Air Bonsai es la creación de Hoshinchu, una pequeña compañía japonesa con seis empleados. Consiste de dos parte principales: una “pequeña estrella”y una base de energía. La “pequeña estrella” es un imán envuelto en esponja que permite que se le transplanten flores. La base de energía se ubica justo bajo la “pequeña estrella” y usa su propio magneto para empujar la planta, permitiendo que la esfera flote y gire tes centímetros sobre la base.
Es la misma tecnología utilizada en los skates flotantes de Lexus y los parlantes flotantes Bluetooth, y probablemente lo que permite el movimiento del droide BB-8 de Star Wars.
Instalarlo es muy sencillo: haces un agujero en la esfera, plantas el bonsái, ubicas el orbe sobre la unidad de base y la reajustas continuamente hasta que se asiente o gire, como prefieras.
La campaña de Air Bonsai ha recibido mas de US$395,000 en fondos, muy por sobre la meta de US$80,000. Y aún quedan 34 días de campaña.
Hay varias opciones de compra de todos los rangos de precio. La pequeña estrella cuesta US$15 por si sola, un box set con las dos piezas (la estrella y la base, sin planta) cuesta US$200, y dos personas han gastado US$10,000 en un paquete que incluye el box set con la planta, una base hecha a mano, y un tour tanto por el jardín bonsái en el taller de Air Bonsai en Japón, con los gastos de viaje y estadía incluidos.
La preferencia de los japoneses por la levitación magnética ya nos ha entregado el tren más rápido del mundo. Ahora nos lleva más allá en el futuro con algo que nunca necesitamos: árboles flotantes.