Un día después del gran incendio en Mariano Roque Alonso, las llamas ya no representan un peligro, aunque aún hay focos activos en el depósito donde se desató el siniestro.
El trabajo de los bomberos voluntarios, que duró más de 10 horas, logró controlar el fuego que afectó a cientos de neumáticos en el lugar.
A pesar de la persistente humareda, las autoridades aseguran que el riesgo de expansión está controlado, y el trabajo de enfriamiento continúa con el personal agotado debido al esfuerzo realizado.