Ed Houben es holandés y tiene 46 años. Perdió su virginidad a los 32 y en 14 años ha tenido 106 hijos. Se consideraba feo y pensaba que nunca más iba a tener sexo. Ahora lo apodan "El Esperminador" o "El Hombre más viril de Europa". Impresionante ¿No?
Todo comenzó cuando, ante la imposibilidad de tener su propia familia, quiso ayudar a otros a ser padres. Se transformó en donante de esperma. Dos veces al mes pasaba por una clínica de fertilidad. Sus deseos eran que el proceso no fuera tan frío y mecánico, por lo que decidió poner un aviso en Internet y llevar él mismo el semen a domicilio.
Un día se cruzó con una mujer que no quería que su hijo fuera concebido en un laboratorio y que fuera hecho de forma "tradicional". Le habían dado permiso para tener sexo con una mujer desconocida. Al ver el ofrecimiento, él le hizo una sola pregunta a la mujer:
"¿Te has hecho una prueba de enfermedades de transmisión sexual?"
Ed no cobra dinero por la donación, a excepción de los solicitantes extranjeros que deben costear su estadía y es padre de 106 niños repartidos en países como Holanda, Alemania , Bélgica, Italia, Francia y España. Dos tercios de sus hijos fueron concebidos de forma natural.
Sus requisitos para ser papá son firmar un acuerdo donde se libera de cualquier reclamo económico, que las mujeres tengan buen estado de salud y no ser viciosas.
Ser donante le ha dado sentido a su vida y confiesa que en sus días de donante artificial llegó a hacerse dolorosas heridas en la piel por el volumen de donaciones. Según los médicos, la esperma de Ed es más rápida que el de la media y si no funciona a la primera, pueden seguir intentándolo durante años.
Ed piensa que seguirá haciendo esto hasta que su cuerpo le aguante porque "ellas me dan a mí el mejor regalo: un hijo sin ataduras"