Gimo es un gatito muy bonito que vive en Corea del Sur. Además de ser un pompón negrito que da ganas de apretujar y amasar todos los días, Gimo tiene una cara preciosa y unos ojos increíbles que lo hacen parecerse, de acuerdo a quienes lo han descrito, a un tribble (los conejos peludos de Star Trek), a una de las bolas de polvo fantasmales que se ven en “El Viaje de Chihiro” de Miyazaki y un poquito a Grumpy Cat si tuviese un buen día.
Lo único que sabemos a ciencia cierta es que es muy lindo y que tiene una cuenta de Instagram con cientos de seguidores, donde a veces comparte el estrellato con otros dos gatos que viven en la misma casa.
No queremos ni imaginarnos sus celos cuando se enteren que su hermano de pronto es una estrella de la internet. Pero, por otro lado, ¿quién podría resistirse a su ternura?