Orlando Arévalo presentó su renuncia a la Cámara de Diputados durante el fin de semana, dejando sin efecto su proceso de pérdida de investidura y su convocatoria ante la Comisión de Asuntos Constitucionales.
Ahora, con su dimisión, surgen nuevas dudas sobre el curso del escándalo de los chats que lo involucraban.