Siempre es mucho más fácil aconsejar a alguien antes que escucharte a ti mismo, ¿no? Bueno, eso tiene una explicación científica.
Nuestra capacidad de elección se va mermando a lo largo del día. Un fenómeno psicológico conocido como ?fatiga de decisión?.
Piensa en la cantidad de decisiones que tomas tanto consciente como inconscientemente a lo largo de un solo día… ¡ES AGOTADOR! La ciencia reveló que ese cansancio puede provocarnos una gran indecisión ante una encrucijada cuya resolución todo el mundo ve clara, excepto nosotros.
Un estudio publicado en Social Psychology and Personality Science, dice que si bien eso es cierto, la regla no se aplica a la hora de tomar decisiones por los demás. Al parecer, para el ser humano, tomar decisiones por otros, es divertido y para nada agotador.
La clave está en saber a quién recurrir por ayuda. Usualmente tu peor opción es alguien que se pasa el día intentando ayudar a los demás, puesto que esa conducta se transforma en algo normal de su día a día y se ve afectada por la fatiga de decisión.
¿Se imaginan cuál es la mejor persona a la que recurrir por un consejo? Alguien imperturbable ante tus circunstancias. Alguien que normalmente cuestione a los demás y se tenga a sí mismo en alta estima.
Por otro lado, los investigadores consideran positivo pedir consejos, ya que eso ofrece una perspectiva diferente y un proceso de reflexión más cuidadoso.
Y a ti, ¿te gusta pedir consejos? ¡Cuéntanos en los comentarios!