El caos se apoderó del centro de Alemania cuando tres hombres empezaron a repartir disparos en el concurrido local comercial. El ministro del interior de la ciudad confirmó la muerte de ocho personas en la balacera.
Se cree que se podría tratar de un ataque terrorista. Los responsables del hecho se han dado a la fuga y la policía local ha realizado un gran despliegue para lograr capturarlos.