El misterio crece en toda la ciudad mientras tratan de saber quién era la pequeña de tres años, La rosa roja aún permanece en su mano. Su piel y pelo están en perfectas condiciones. Un tejido de flores de lavanda adorna su peinado, imperturbable pese al tiempo: 145 años pasaron desde que Miranda fue enterrada. La pequeña tenía 3 años al momento de su muerte y San Francisco aún no sale de su asombro por el descubrimiento en la vivienda de una familia.
El 9 de mayo, cuando pocos obreros estaban removiendo escombros en la vivienda de Ericka Karner en el Distrito de Richmond, se sorprendieron y asustaron por el hallazgo. De inmediato llamaron a la policía para que investigaran lo que habían desenterrado.